Te escapas de entre mis dedos

Vos ya te saliste del espejo,
te empezaste a ver detalle por detalle
como resultado
ese raro desacuerdo

Me sacás de la imagen
de tu subconsciente
lenta y brutamente;
pero la apariencia del conciente te dice
que me dejes de pie
ya que la cena esta servida,
aunque tu impuntualidad
te hará llegar hasta que haya enfriado.

Vos ya te empezás a ver
con nuevos términos,
reales y fantasiosos
"Tu cara, la pupila a ver no alcanza",
solo el reflejo sabe hacerte mirar
de ojo a ojo.

Me miras confundida con la cabeza
empapada de ideas
que vos misma no enténdes;
la desesperación de esas preguntas ignoradas
de encontrar respuesta
empiezan a voltear el magnetismo
de la atracción
poniendo en advertencia
que se acerca el punto
en que habrán de repelerse.

Vos te seguís mirando
como maravillada
odiando sin darte cuenta
lo que el aire
para el respiro te ofrece.

Ronald Vladimir Vega